A pesar de las importantes diferencias en volumen de usuarios, el artículo apunta como temas de reflexión cuestiones como la creciente complejidad inherente a la gestión de Facebook o los constantes cambios y preocupaciones acerca de su gestión de la privacidad, frente a un Twitter pasmosamente simple en su gestión y con una orientación mayor a su uso desde el móvil. Además, entra a valorar el impacto en relevancia de los Likes de Facebook en términos de tráfico e indexación: el tráfico generado por la viralidad de Facebook parece convertir fundamentalmente dentro de la propia red y carece de impacto en Google, mientras que la actividad de Twitter da lugar a un tráfico de mayor calidad y recibe además un muy buen tratamiento por parte del buscador.
Los conceptos de influencia y relevancia, sin embargo, deben proyectarse más allá: mientras Facebook es una red que de manera primaria e intuitiva relacionamos con nuestro círculo de amigos, Twitter responde a una imagen más abierta, en la que suele haber de manera más frecuente personas o cuentas no personales a las que decidimos seguir. Mientras en Facebook vemos aquello que nuestros amigos han marcado con sus Likes, en Twitter nos exponemos a un círculo generalmente más amplio y en el que, además, disponemos de índices de popularidad que nos llevan en muchos casos a una actividad de exploración. En términos de actividad, un grupo de Facebook proporciona una oportunidad mayor para la organización y coordinación, mientras que Twitter se queda en una actividad instantánea de difusión, demostración o apoyo. En términos de frecuencia, el análisis va en el mismo sentido: podemos aceptar a alguien en nuestro timeline que actualice muy a menudo en Twitter si nos resulta relevante, pero en Facebook, alguien que nos sature el timeline suele ser considerado, en cierto sentido, un pesado al que nos planteamos incluso silenciar.
¿En qué dirección están evolucionando Facebook y Twitter en este sentido? En lo personal, mi uso de Facebook, particularmente de mi perfil, se restringe a saber qué están haciendo unos pocos amigos, familiares y conocidos. El uso que le doy como página es diferente, obviamente más asimétrico: aunque le doy la atención que merece el hecho de que supone la segunda fuente de tráfico para mi blog, es en realidad para mí una vía de salida, no de entrada de información. El caso de Twitter, tercera fuente de tráfico para esta página, es completamente distinto. En mi uso diario de Twitter absorbo una cantidad muy superior de información a traves de personas a las que sigo aunque no necesariamente las conozca, efecto que se extiende con los retweets de esas personas y con el manejo de algunas listas. A pesar de la importancia evidente de Twitter como vía de salida de información (envío a Twitter todo lo que escribo y bastantes cosas más), su papel como absorción o entrada de información es decididamente más importante. Y además, cuenta con un indicador de relevancia en forma de trending topics que permite, tras eliminar los memes, el spam político y a las sempiternas Beliebers, tomar un pulso rápido a la actualidad. Para mí, un uso completamente diferente y, es más, poco relacionado o comparable entre sí.
¿Experiencias? ¿Cuál de las dos herramientas, Twitter o Facebook, tiene para ustedes un uso más relevante?
enriquedans
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