El mito de los crucigramas

Derrumbando el mito social de los crucigramas

  Modelo de Crucigrama  

Todos hemos tenido algún viaje largo que hacer, y sabemos que para esas ocasiones una buena revista o diario de crucigramas es el mejor amigo en el que confiar nuestro aburrimiento. Es más, algunos fundamentalistas suelen jactarse de su habilidad al haber descubierto las más difíciles palabras.

Sin embargo, el haber descubierto el nombre del tercer emperador de los hunos o el verbo para la acción de sacudir la mano frenéticamente no son suficientes como para poner a prueba tu cerebro, y mucho menos para prevenir el Alzheimer, tal como sugiere una creencia popular en torno a los crucigramas.

De hecho, los crucigramas únicamente desarrollan una función del cerebro conocida como fluidez, y sólo es una entre las tantas funciones de nuestro órgano mayor. Es más, ni siquiera logran desarrollarla en un grado considerable.

La fluidez es un proceso cerebral que concierne a las habilidades del lenguaje y de la formación de palabras, pero únicamente los crucigramas que son eminentemente desafiantes para tu inteligencia pueden contribuir a desarrollarla. Sin embargo, un par de crucigramas no harán por si solos que tu inteligencia aumente, y tampoco te generarán un escudo contra el Alzheimer.

Por lo tanto, si te vas de viaje o no tienes nada que hacer no te tomes muy en serio tu crucigrama. Disfrútalo por lo que es: un pasatiempo, y no un test de inteligencia.

.